lunes, 14 de junio de 2010

Examen (Exam)

Año: 2009.
Género: Thriller.

País: Reino Unido.

Duración: 96 minutos.

Dirección: Stuart Hazeldine.

Intérpretes: Luke Mably, Adar Beck, Pollyanna MacIntosh, Jimi Mistry, Nathalie Cox, Colin Salmon, Gemma Chan, Chuk Iwuji, John Lloyd Fillingham.


"Ocho candidatos con talento llegan a la fase final de selección para unirse a una misteriosa y poderosa organización. La habitación no tiene ventanas, únicamente hay un controlador que les plantea una simple pregunta. Las reglas son: No abandonar la habitación, no hablar con él y no estropear el papel del examen. El tiempo comienza, los candidatos giran su papel y se dan cuenta que está en blanco..."


Las películas que utilizan un simple escenario como planteo inicial de su historia son muy arriesgadas; películas como Cube y Saw son claros ejemplos de que tan bien pueden resultar estas puestas en escena cuando hay buenas ideas detrás.
Exam es el debut del británico Stuart Hazeldine, quien para su primer opus filmico bebe de las fuentes antes mencionadas y un poco también de la obra El Método Gronhölm, haciendo una mezcla bien agitada que da como resultado una obra de suspenso superior a lo cotidiano, con muchos puntos a resaltar y apenas fallas en su haber.

Ya en los escasos créditos iniciales, se deja entrever a los personajes (ocho) en la tarea cotidiana de arreglarse antes del día D, el día de la entrevista para su próximo trabajo. A través de los detalles es que se va construyendo cada una de las personalidades de los ocho candidatos. Una vez dentro de La Habitación, se les dictarán las reglas para poder realizar el examen. Con 80 minutos para resolverlo, y una hoja casi totalmente en blanco, los candidatos deberán unir fuerzas para resolver el examen y quedarse con el puesto de trabajo por el que muchos morirían.

Por supuesto, la esencia que Saw aportó al género se deja entrever en la trama, aunque tomando los mejores aspectos de ella y disfrazándolos para utilizarlos de la mejor manera posible aquí. Cada dato, cada pista les sirve a los personajes para ir desarrollando y empujando la trama un paso adelante. Con cada paso y pista encontrada, la historia se vuelve más interesante y angustiosa.

Estas personas no tienen nombre, y no están interesados en saber el de los otros, ya que uno correctamente los va apodando uno a uno. Detro de ellos, el que más destaca es Luke Mably, al principio el más desenvuelto de ellos, con el que el público genera más empatía, para luego dar un giro de timón inesperado y pasar a ser el detestable. No sólo el tiene un giro en la trama, sino que varios otros también; es una accin constante que tiene la película, sorprender con cada nueva actitud de los personajes. El más reconocido acá es Jimi Mistry, que también tiene un giro importante, y Pollyanna MacIntosh, una pequeña joya que tiene una escena tan emotiva como pivotal y esencial en la relación entre personajes.

A pesar de tener sólidas interpretaciones, hay ciertos personajes que sufrieron de escasez en la historia, y no están tan desarrollados como los otros; esto puede perjudicar la percepción del espectador ya que no todos tienen iguales motivaciones para conseguir el trabajo ni el mismo apuro por él.

Un detalle clave es la ambientación; La Habitación es gris y claustrofóbica, sin ninguna ventana y llena de luces; dejando de lado al guardia, no hay nadie más, excepto el vigilante observándolos desde el otro lado del vidrio blindado. En cierto momento, hay un juego de luces muy temático, y la habitación toma otras tonalidades. Hay agua en juego, hay vidrios esparcidos, es Saw restándole 90% de violencia, lo cual es genial.

El director Stuart Hazeldine se las amaño para realizar una película muy minimalista que le compite codo a codo a los grandes tanques de Hollywood; la definición de las imágenes es muy clara y ciertas tomas de pronto hacen que la habitación luzca más grande de lo que en realidad es.
Lo mejor de Hazeldine es la manera en que logra atrapar al espectador en su juego de tensión; por momentos se va acrecentando, luego disminuye, para dar un tirón de adrenalina más, y seguir tensionado y volverse acuciante llegando al final. Por cierto, la escena de la tortura no es apta para cardíacos.

La resolución, si bien es muy clara, puede decepcionar; lo que sí, no es una resolución descerebrada a lo The Forgotten con Julianne Moore o Knowing con Nicholas Cage, a pesar de meterse por momentos con toques de ciencia ficción.

Exam es un gran thriller, bien dosificado a lo largo de su metraje con giros interesantes e inteligentes, que tendrán al espectador firme hasta la resolución del conflicto. Así, se demuestra que con muy poco se puede hacer mucho.



Calificación: B

1 comentario:

Mariel R.a dijo...

yo la quiero ver, este es el tipo de peliculas que amo <3